Los últimos días
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Recuerda que en los últimos días llegarán tiempos difíciles. La gente se volverá egoísta, amante del dinero, fanfarrona y orgullosa. Se insultarán unos a otros, no obedecerán a sus padres, no darán ni las gracias y serán mundanos. No sentirán afecto por los demás ni estarán dispuestos a perdonarlos. Hablarán con maldad, estarán fuera de control, serán crueles y odiarán el bien. En esos mismos días, la gente traicionará a sus amigos, actuará sin pensar, se enorgullecerá de lo que sabe y en vez de amar a Dios, amará los placeres. Parecerán ser muy religiosos, pero con su manera de vivir demostrarán que en realidad rechazan servir a Dios; no te metas con esa gente.
Algunos de ellos entran a las casas y convencen a mujeres débiles llenas de pecado, que se dejan llevar por toda clase de malos deseos. Aunque ellas siempre tratan de aprender, nunca terminan de entender la verdad. Ellos están en contra de la verdad, como Janes y Jambres,* Janes y Jambres Probablemente los magos que se opusieron a Moisés en la corte del faraón. Ver Éx 7:11–12:22. quienes estaban en contra de Moisés. Tienen mentes retorcidas y han fracasado en la fe. Pero no tendrán éxito en lo que hacen y así todos verán lo tontos que son, como pasó con Janes y Jambres.
Instrucciones finales
10 Pero tú me conoces, sabes lo que enseño y cómo vivo. Sabes también el propósito de mi vida, que tengo fe, paciencia y amor, y que no me doy por vencido ante 11 la persecución ni el sufrimiento. Te enteraste de la clase de persecuciones que sufrí en Antioquía, Iconio y Listra y de cómo el Señor me salvó de todo eso. 12 Pues todo el que pertenezca a Jesucristo y quiera vivir dedicado a Dios será perseguido, 13 pero los perversos y los engañadores irán de mal en peor, engañarán y serán engañados.
14 Pero tú sigue practicando las enseñanzas que has aprendido. Sabes que son ciertas porque conoces a quienes te las enseñaron. 15 Desde niño conoces las Sagradas Escrituras que te pueden hacer sabio. Esa sabiduría te lleva a la salvación a través de la fe en Jesucristo. 16 Toda la Escritura es un mensaje enviado por Dios, y es útil para enseñar, reprender, corregir y mostrar a la gente cómo vivir de la manera que Dios manda, 17 para que el siervo de Dios esté listo y completamente capacitado para toda buena obra.