Así que sólo tenemos dos posibles respuestas acerca de los desastres naturales. O vienen de parte de Dios o de parte de Satanás. Antes de que veamos escrituras específicas que determinan cuál es la respuesta correcta, analicemos un poco más estas dos posibilidades.
Si Satanás es el que causa desastres naturales, entonces Dios podría o no detenerlo. Si Dios puede detener a Satanás cada vez que quiere enviar un desastre natural, pero no lo detiene, entonces Dios también es responsable. El desastre nunca hubiera ocurrido sin su permiso.
Y ahora, por otro lado, asumamos, por un momento que Dios no puede detener a Satanás pero quisiera detenerlo, ¿es eso posible?
Si Dios no puede detener a Satanás para que cause un desastre natural, entonces o Satanás es más poderoso que Dios o Satanás es más inteligente que Dios. Esto es lo que dicen aquellos que creen que “Satanás ganó el control sobre el mundo cuando Adán pecó”. Ellos dicen que Satanás tiene el derecho legal de todo lo que pasa en la tierra porque robó el arrendamiento a Adán. Ahora, supuestamente, Dios quisiera detener a Satanás, pero no puede porque debe honrar el contrato de Adán que Satanás ahora posee. En otras palabras, Dios era tan estúpido que no podía saber lo que pasaría después de la caída de Adán, pero Satanás, siendo más inteligente que Dios, ahora tiene más poder del que Dios quisiera que él tuviera. Personalmente, yo no puedo decir que Satanás es más sabio que Dios.
Si esta teoría de Satanás fuera cierta, tendríamos que preguntarnos por qué Satanás no manda más terremotos y huracanes de los que se producen, y por qué no destruye a grandes poblaciones de cristianos con estos desastres. (Si tú dices que esto es debido a que Dios no le permite destruir a las poblaciones de cristianos, entonces estás admitiendo que Satanás no puede obrar sin el permiso de Dios).
Cuando especificamos más las dos posibilidades, las únicas dos respuestas posibles a nuestra pregunta son estas: (1) Dios causa los huracanes y los terremotos, o (2) Satanás los causa con el permiso de Dios.
¿Puedes ver ahora que sin importar cuál respuesta es la correcta, Dios siempre es el responsable? Cuando la gente dice que “Dios no envió tal huracán sino que fue Satanás con el permiso de Dios”, no están dejando a Dios sin culpa como tal vez esperan hacerlo. Si Dios pudo haber detenido a Satanás para que no enviara este huracán, lo quisiera o no, Él siempre es responsable en parte. Los humanos rebeldes pueden ser los culpables por su pecado (si el huracán fue permitido o enviando por Dios para juicio), pero aun así, es absurdo pensar que Dios no está involucrado en forma alguna.