¿Qué es, específicamente lo que la Escritura dice acerca de los desastres naturales? ¿Dice la Biblia que Dios o el diablo los causa? Veamos primero los terremotos pues la Biblia habla de muchos.
De acuerdo con la Escritura, los terremotos pueden ocurrir como juicio de parte de Dios. Leemos en Jeremías, “ante su ira tiembla la tierra y las naciones no pueden sufrir su indignación” (Jeremías 10:10, énfasis agregado).
Isaías nos advierte:
“por Jehová de los ejércitos serás visitada con truenos, con terremotos y con gran ruido, con torbellino y tempestad, y con llama de fuego consumidor.” (Isaías 29:6, énfasis agregado).
Debes recordar que durante los días de Moisés, la tierra se abrió y se tragó a Coré y a sus seguidores rebeldes (ver Números 16:23:34). Esto era claramente un acto de juicio. Otros ejemplos del juicio de Dios por medio de terremotos se pueden encontrar en Ezequiel 38:19; Salmos 18:7; 77:18; Hageo 2:6; Lucas 21:11; Apocalipsis 6:12; 8:5; 11:13; 16:18.
Algunos terremotos que encontramos en la Escritura no son necesariamente actos de juicio enviados por Dios, pero fueron causados por Dios. Por ejemplo, de acuerdo con el Evangelio de Mateo, hubo un terremoto cuando Jesús murió (Mateo 27:51, 54), y uno cuando resucitó (Mateo 28:2). ¿Causó Satanás estos terremotos?
Cuando Pablo y Silas estaban cantando alabanzas a Dios a la medianoche en una cárcel de Filipos, “entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron” (Hechos 16:26, énfasis agregado). ¿Causó Satanás este terremoto? No lo creo, aun el carcelero fue salvo después de ver el poder de Dios. Y este no es el único terremoto causado por Dios en el libro de los Hechos (ver Hechos 4:31).
Recientemente leí algo acerca de ciertos cristianos con buena intención que escucharon la predicción de un terremoto en cierto lugar y fueron a hacer “guerra espiritual” en contra del diablo. ¿Puede ver el error de lo que asumieron? Hubiera sido más bíblico para ellos el orar por misericordia de parte de Dios por la gente que vivía en esa área. Y si hubieran hecho eso, no hubiera existido la necesidad de perder el tiempo y el dinero en el viaje hasta el lugar del terremoto, ellos pudieron haber orado a Dios desde donde vivían. Batallar contra el diablo para detener un terremoto no es bíblico.